viernes, 1 de enero de 2021

El club de los corazones solitarios (Elizabeth Eulberg)


 Penny es la hija de unos fanáticos de los Beatles, por ende, no es de extrañar que ella también comparta su amor hacia dicha banda, mas no del modo tan obsesivo del de sus progenitores. Así pues, cuando a Penny le rompe el corazón el amor de toda su vida, se refugia en las canciones de la agrupación, pero también en un club que funda, que es “El club de los corazones solitarios”. Su club tiene como regla fundamental no salir con más chicos hasta que termine la preparatoria, puesto que para ella son individuos inmaduros y problemáticos.


Al principio, su mejor amiga se burla de su idea y no está dispuesta a unírsele en su locura, pero quien sí lo hará será una antigua amiga, al terminar con su novio y encontrarse totalmente sola.

Pero no solo será una chica la que se identifique con Penny, sino que más adelante se le irán uniendo muchas más jóvenes cansadas de estar con el sexo opuesto. No obstante, no todo es perfecto, pues luego de que el club se convierta en una suerte de apoyo para las miembros de este, el rector de su instituto se opondrá a la idea y, por otra parte, Penny tendrá deseos de salir de nuevo con un muchacho.

Este libro cuenta con 334 páginas, agrupadas en 38 capítulos. Está narrado en primera persona, en tiempo pasado, por la protagonista, Penny.

Me ha gustado la idea, mas el desarrollo no tanto. Los personajes se me han hecho muy estereotipados, los padres de Penny se me han antojado absurdos, el repentino cambio de actitud de la antigua amiga de Penny y de Penny no me ha convencido para nada y los “antagonistas” parecen meros títeres. Pero bueno, hasta cierto punto el libro me ha entretenido y me encontré haciéndole barra a Penny y al chico del que comienza a enamorarse sin querer.

Puntuación: 2.5/5

No hay comentarios:

Publicar un comentario

El cuaderno de Noah (Nicholas Sparks)

  AMORES DE PELÍCULA. ¿Quién no ha llegado a soñar con uno? ¿Quién no ha fantaseado con vivir un romance de esos que hacen que la vida sea m...