La hija de una familia adinerada le pone fin a su vida y todo parece apuntar a que ha sido la ausencia de cariño y de acompañamiento paterno, más su incursión en una secta satanista, lo que la orillara a tomar semejante decisión.
Cinco muchachos se adentran sin linternas, sin provisiones y sin guía, en una caverna de Zapatoca, Santander, para perderse entre sus corredores y quedar atrapados allí, conviviendo con el frío, el hambre, la debilidad y las alucinaciones.
Un joven, huyendo de la violencia de Medellín, va a parar en la selva del Amazonas de Ecuador, en donde pasa sus días rodeado de naturaleza y magia ancestral, intentando ser feliz pero sintiendo el temor y la desdicha que le generan el destierro.
Un grupo de excursionistas decide explorar la cúspide de los Andes, pero solo el guía y una mujer persisten en su empresa; decisión, esta, que se torna fatal para uno de ellos y traumática para quien sobrevive.
En Urabá, una mujer y un hombre se salvan de ser decapitados por la guerrilla; la primera porque pierde el conocimiento y sus verdugos la creen muerta y, el segundo, porque logra perpetuar una huida digna de película.
Por último, la comunidad de San José de Apartadó se ve azotada por numerosas muertas, en las que no solo los grupos insurgentes estarían involucrados, sino también el propio Ejército, que se reúsa a aceptar que estos sean neutrales durante la guerra.
Libro con 335 páginas, que tiene como tema central la inminencia de la muerte, que algunos protagonistas logran postergar, pero que otros deben afrontar de manera inexorable.
Con una amplia documentación histórica y con un trabajo periodístico excelente detrás, el autor demuestra en esta obra, una vez más, que en Colombia ocurren sucesos que superan por mucho a la ficción, los que muchas veces no son expuestos, ya sea porque no hay quien indague por ellos, o porque su investigación está vedada por la parcialidad de los grandes medios de comunicación y/o por la censura autoimpuesta de corresponsales independientes que prefieren vivir a desvelar verdades crudas que los condenen.
Puntuación: 4/5
No hay comentarios:
Publicar un comentario