Desayuno en Tiffany’s (Truman Capote)

 

Este pequeño libro, en tan solo 156 páginas, reúne cuatro magníficas historias, que pese a ser tan disímiles entre sí, tienen en común que cuentan con personajes entrañables y con tramas que a simple vista pueden parecer ordinarias, pero que gracias al desarrollo que les da Capote, resusta todo un placer degustarlas. También es preciso resaltar que sus finales, aunque agridulces, son absolutamente memorables.

Para comenzar, “Desayuno en Tiffany’s”, es la obra más extensa de este compendio, y es que, a diferencia de las demás, no es un relato sino una novela corta. Aquí, el lector se encuentra con Holly Golightly, una muchacha que tiene la habilidad de fascinar allí a donde va, pero también de decepcionar a quienes intentan crear un vínculo cercano con ella, dado su carácter impredecible, su ambición y su practicidad. Empero, pese a esto, es inevitable no excusarla cuando se sabe que su actuar obedece a su convicción de que solo siendo así como es, algún día hallará un lugar en el mundo que la haga sentir tan bien, como siempre se ha sentido en la joyería de Tiffany’s. “Una casa de flores” es el relato que sigue, y en él se narra la historia de una prostituta que abandona a sus amigas y al único trabajo que ha conocido en la vida, cuando conoce a un hombre que se enamora de ella y que le propone matrimonio. La muchacha acepta, sin saber que su vida como casada se verá atormentada por la anciana abuela de su marido, una vieja hechicera que la atormentará incluso después de que muere. “Una guitarra de diamantes” cuenta cómo el hombre más respetado y reservado de una prisión, guarda consigo una guitarra que perteneciera al único recluso que llega a considerar como su amigo, al devolverle este las ganas de vivir.

Por último, “Un recuerdo de Navidad” versa acerca de la gran amistad que une al más chico y a la más anciana de una casa, vínculo este que se ve plenamente reflejado en el último mes del año, cuando ambos se dan a la tarea de hacer pasteles para regalar, obsequiarse regalos y disfrutar, juntos, de placeres simples pero muy significativos para ambos.

Puntuación: 5/5